Debido al problema de la pandemia provocada por el COVID-19 hemos cambiado muchos de nuestros hábitos cotidianos. Uno de estos nuevos hábitos es el uso de la mascarilla.
Algunas personas culpan a la utilización de la mascarilla de la aparición de alteraciones en su salud bucodental. Mal aliento, manchas en los dientes, boca seca, inflamación de las encías son algunas de las patologías que según comentan provienen por el uso de la mascarilla.
Desde Clínica Dental Galindo de Barcelona recomendamos a todos el uso de la mascarilla para protegernos de la infección por COVID-19 e indicamos que no existe ningún estudio científico que relacione el uso de la mascarilla con la aparición de ningún tipo de patología bucodental.
¿El uso de la mascarilla aumenta la halitosis?
La halitosis o también conocida por el problema de mal aliento es una patología compleja cuyas causas son muy diversas, como ya explicamos en un anterior artículo. Pero lo que si podemos afirmar rotundamente es que llevar mascarilla no aumenta el problema del mal aliento.
Lo que sí que es cierto que con el uso de la mascarilla, una parte del aire que se expira queda en el interior de la mascarilla, en contacto con la nariz. Esto hace más evidente el olor que tiene nuestro aliento. Personas que tienen el problema de la halitosis han empezado a notar con el uso de la mascarilla un problema que llevaban tiempo desarrollando pero que no eran conscientes.
¿Aumentan los problemas dentales con la mascarilla?
Hoy día usar mascarilla es necesario para frenar la infección por coronavirus, ya que es un tipo de virus que se transmite mediante las gotitas de saliva. El uso de las mascarillas hace que parte del aire expirado no se libere con la misma facilidad, pero esta nueva situación hace que sea altamente improbable que se produzca un desequilibrio entre las bacterias de la boca, produciendo patologías bucodental.
¿Cuánto tiempo podemos conservar las mascarillas?
Las mascarillas se deterioran a medida que se van utilizando ya que pierden su eficacia, se les acumula saliva e incrementa el mal olor. Dependiendo del tipo de mascarilla que se esté utilizando la podremos usar más o menos horas.
Una mascarilla quirúrgica debe desecharse cuando se ha utilizado entre unas 4 y 8 horas. Las mascarillas FFP2 o FFP3 tienen una mayor durabilidad, pero también deben desecharse cuando se han utilizado unas 12 horas.
Desde Clínica Dental Galindo os recordamos de la importancia de usar la mascarilla para protegernos a nosotros y para proteger a los demás de la infección por COVID-19 y asegurar que el uso de la mascarilla no provoca ningún problema bucodental.
También te puede interesar

Especialista en Implantología, Periodoncia y Estética Dental. Sus más de 20 años de experiencia en odontología integrada le permiten tener una amplia visión de los planes tratamientos dentales que pueden realizarse y así ofrecer la solución más adecuada a nuestros pacientes.