Con toda probabilidad, si hablamos de dientes y machismo no encontraremos una relación directa entre estos dos términos. Pero, por desgracia, la diferencia de trato entre hombres y mujeres ha generado distinciones en el cuidado de la salud dental.
La discriminación de género es un problema recurrente en nuestra sociedad desde los primeros tiempos de la humanidad. En muchos lugares, las mujeres han sido tratadas como ciudadanas de segunda clase, con menos derechos y oportunidades que los hombres.
Históricamente, las mujeres han sufrido la discriminación en muchos aspectos de la vida, incluyendo el acceso a la educación, el empleo, la participación política e, incluso, el acceso a la sanidad.
La Edad Media fue uno de los períodos de la historia donde más patente se hizo esta diferencia entre géneros. Ahora lo podemos evidenciar estudiando las dentaduras de hombres y mujeres de aquella etapa. Ahí queda plasmada la diferencia al acceso de la salud dental entre las personas de diferente género.

Durante la Edad Media, a pesar de las magníficas construcciones, los avances sobre salud dental eran escasos. En la fotografía,Santa María del Naranco, en Asturias.
¿Cómo era la salud dental en la Edad Media?
Es de sobra conocida la mala salud dental de la población en la Edad Media. Alimentos ricos en carbohidratos y azúcares, como el pan, cereales y miel, eran la dieta habitual en esa época. Además, una deficiente higiene dental provocaba graves infecciones que podían conducir a sepsis generalizadas y a la muerte.
La dieta basada en carbohidratos aumentaba el riesgo de sufrir caries dentales que conllevaban infecciones y pérdida de dientes. Todo esto, más la falta de acceso a tratamientos dentales apropiados y la mala higiene dental, contribuían a una pésima salud dental de la época.
A pesar de que el acceso a la salud dental era deficiente, cabe señalar que lo era aún más para la mujer que estaba, en general, peor alimentada y tenía un peor acceso a los tratamientos médicos.
¿Cómo sabemos que existió machismo en la salud dental?
Gracias a más de 10.000 registros dentales procedentes de 139 yacimientos arqueológicos europeos de una antigüedad que ronda los 1.000 años, científicos estadounidenses han podido confirmar lo que ya se intuía: las mujeres son discriminadas en aspectos de salud dental desde hace siglos.
Los dientes son el tejido más duro que existe en el cuerpo humano. Al morir, los dientes son uno de los tejidos que más tardan en descomponerse. Gracias a esta cualidad se pueden analizar para saber cómo se comportaban nuestros antepasados. Las lesiones permanentes que quedan grabadas en los dientes, ya sean causadas por traumatismos, malnutrición o enfermedades, nos ayudan a entender la desigualdad de género en tiempos pasados.
Estos estudios han sido recogidos y publicados el 13 de marzo de este año en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS). Gracias a los datos recogidos se ha logrado mostrar como las normas de género se han mantenido y se mantienen en muchos lugares del mundo.
Las diferencias de la salud dental entre hombres y mujeres
En este mismo estudio se comparan diferentes zonas de Europa, tanto las que se muestran con una mayor desigualdad histórica como las que se muestras más igualitarias.
En el yacimiento de Istria, asentamiento urbano de origen griego a orillas del Mar Negro alrededor del año 550 d.C., se encuentra que de los 49 esqueletos, el 58% de las mujeres aparecían con signos de desnutrición y traumatismos dentales. Pero solo en el 25% de los hombres ocurría lo mismo.
Está claro que las diferencias dentales entre sexos en una misma ubicación son una referencia del distinto trato de atención dental y dietética que se recibía.
De manera relevante, se ha podido corroborar que en los lugares donde los hallazgos evidencian una clara diferencia entre hombres y mujeres, esta persiste todavía.
Machismo, dientes y malnutrición
La diferencia entre la alimentación que podía recibir un hombre y una mujer era distinta. Los mejores alimentos quedaban reservados a los hombres, sufriendo así las mujeres una malnutrición que puede evidenciarse en los hallazgos arqueológicos. Vemos que la relación machismo y dientes, por sorprendente que nos pueda parecer, es cierta.
La malnutrición tiene un impacto significativo en la salud dental. La falta de nutrientes importantes en la dieta puede debilitar el esmalte dental, hacer que los dientes sean más susceptibles a las caries y las enfermedades de las encías, y retrasar el crecimiento y desarrollo adecuados de los niños.
Por ejemplo, la falta de calcio en la dieta puede debilitar el esmalte dental y aumentar el riesgo de caries dentales y enfermedades de las encías. La deficiencia de vitamina D también puede afectar negativamente la salud dental, ya que esta vitamina es necesaria para la absorción de calcio en el cuerpo. Además, la deficiencia de vitamina C puede provocar encías inflamadas y sangrantes, así como la pérdida de dientes.
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Especialista en Implantología, Periodoncia y Estética Dental. Sus más de 20 años de experiencia en odontología integrada le permiten tener una amplia visión de los planes tratamientos dentales que pueden realizarse y así ofrecer la solución más adecuada a nuestros pacientes.